QUO VADIS 2009 (Quo Vadis Domine)
Quo vadis es una novela histórica del autor polaco Henryk Sienkiewicz. Fue escrita entre los años 1895 y 1896, y en ella se narran las vicisitudes de muchos y muy diferentes personajes en la época del emperador romano Nerón.
También alude a las palabras «Quo Vadis, Domine?» («¿Adónde vas, Señor?») que, según la leyenda y la tradición, fueron pronunciadas por el apóstol Pedro mientras huía de Roma para ponerse a salvo de la persecución de los cristianos por orden del emperador Nerón. Ante la pregunta, Jesús responde: «Voy a ser crucificado en Roma por segunda vez porque mis propios discípulos me abandonan». Avergonzado de su cobardía, Pedro regresa a Roma para afrontar su destino: el martirio.
Pues así ha empezado este 2009, que a saber donde nos llevará, “Quo vadis 2009”, de momento lo que nos ha traído no son buenos augurios, con una crisis mundial sin precedentes en prácticamente un siglo y unas consecuencias impredecibles en los países emergentes y del llamado tercer mundo unos abocados a retroceder en su desarrollo años sino lustros y otros a ahondar mas su miseria, con el mundo enzarzado en distintas guerras unas visibles y otras invisibles o larvadas, la ultima, pero una de las más antiguas, la invasión de la Franja de Gaza por Israel con una estela de muerte y destrucción como no se conocía en años en esa zona del mundo.
Tendremos que preguntar «Quo Vadis, Domine?» a los lideres mundiales discípulos de unas u otras escuelas políticas, sociales, económicas, ¿se avergonzaran ellos de hacia que abismos nos llevan? ¿serán capaces de afrontar sus responsabilidades para con el genero humano dejando de lado su cobardía y sus pequeños intereses?
Tendremos que soportar a toda una corte de líderes mundiales que como Nerones modernos desde su balcón simplemente asistan a al incendio de la nueva Roma.
Si fuera así me temo que los que tendremos que afrontar nuestro destino y prepararnos para el martirio seremos el resto de seres humanos.
“Queridos Mirones”, sed buenos, si podéis. (San Felipe Neri)
PD: Perdonad el tono evangélico, debe ser influencia de las campañas de autobuses, ateos y cristianos.
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